2. Trasladando la totora a tierra

Aquí comienza el trabajo de traslado de la totora.
Como podemos ver en esta imagen, los botes van bien cargados.
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Aquí estamos acomodando la totora en el bote.
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Remar en estos botes no es trabajo sencillo. Los botes y remos están totalmente realizados a mano. Los Aimaras, de esta región nacen en contacto con el lago y nos llamo la atención que reman parados y mirando a la proa.
En esta imagen vemos a un joven Aimara remando como estamos acostumbrados a ver.
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Llegando a la costa.
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Aquí podemos ver a uno de los artesanos descargando y trasladando la totora a la costa.
En este trabajo mojarse los pies es cosa de todos los días y el frío del lago hace doler a quienes no estamos acostumbrados.